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¿Boda en otoño-invierno? PARTE 2: organización y decoración

Tenemos la costumbre, por repetición, de que cuando nos imaginamos una boda, lo hacemos en verano. En un día soleado y caluroso, con flores, mucho verde y tiempo en el exterior. Si te casas en este otoño-invierno, te dejamos nuestros consejos para que el reto te resulte lo más fácil posible:

Decoraciones en otoño

El otoño es una estación visualmente muy cálida aunque ya haga más frío, por los tonos que adquiere la naturaleza y la luz dorada que tanto la caracteriza. Por ello es importante conseguir una iluminacion igual de acogedora en tu boda. Para ello, hoy contamos con muchísimas opciones, pero el uso de velas para complementar la deco es infalible con esta estación, además de económica y fácil a la hora de colocar.

De base, podéis utilizar esa gama de colores tierra que tan de moda están con rosas, amarillos, naranjas, marrones y granates. Combinando bien algunos de estos tonos y siguiendo un estilo minimalista o boho-chic, vuestra decoración quedará espectacular. Además de ser la paleta del momento, no hay época del año que mejor pueda casar con ella.

Es muy oportuno aprovechar elementos de la propia temporada como hojas, calabazas y frutos. Que lo hagáis vosotr@s mism@s puede ser, además, una experiencia muy agradable, por no decir que el acto de haber «recolectado» en primera persona los elementos de la decoración le da otro cariño y cuidado a la atmósfera que otros tipos de boda no podrían.

Tomasz Kornas Photography

Otros toques orgánicos como la madera son materiales que se prestan a colaborar con esta estación. Para ello podéis recoger ramas del bosque con formas bonitas y singulares para que sirvan de estructura de centro de mesa, para colgar del techo y combinar con la iluminación o para prácticamente adornar cualquier rincón y darle un toque especial.

Para hacer la boda vuestra y completar la decoración, siempre es buena idea dar mensajes de cercanía: carteles de madera o nombres de madera de cada invitad@ marcarán la diferencia y encajarán a la perfección en cualquier boda otoñal sin mayores quebraderos de cabeza.

Editorial Rachel L’Antigua

Decoraciones en invierno

Para una boda invernal es genial aprovechar la elegancia y la melancolía que transmite esta época y tirar hacia los colores pulcros de sus paisajes: la nieve, los árboles sin hojas y los prados ocres. Esto se traduce en el uso de blancos, grises y marrones para complementar con plateados o dorados, y luego dar acentos de color más potentes con verdes, rojos o azules.

Normalmente, que una boda sea de día o de noche puede influir en la decoración, pero celebrándola en pleno invierno, donde los días son tan cortos, las reglas del juego cambian un poco. Lo más importante es la iluminación, y ahí tenéis que decidir: si queréis una escena abierta, clara, blanca, en la que se pueda contemplar todo y el espacio parezca más grande, lo mejor es no escatimar en iluminación. Para esto funciona muy bien colocar grandes lámparas de techo y/o guirnaldas que rodeen el lugar para que repartan la luz de forma uniforme y den ese efecto de transparencia.

En cambio, y esto es algo que abunda en bodas de noche, puede que os represente más un ambiente enigmático, romántico e íntimo, algo que hará sentir a los presentes como en su propia casa. La mejor manera de encajar este tipo de espacios es con puntos estratégicos de luz cálida y más tenue para enfatizar las zonas que queramos mostrar, sin olvidar, claro está, una iluminación decente de todo lo demás.

Decoración de Macarena Gea

Un elemento que ayuda mucho a endulzar este tipo de escenas son las letras luminosas de madera. Regulando la luz según la intensidad que se quiera conseguir y gracias a su poco peso, se pueden cambiar de zona sin ningún problema y dar un servicio excelente.

No hay nada que mejor encaje con estos ambientes elegantes y especiales como las banderolas para bodas. Con ellas podéis crear un estilo y al ser de lienzo combinarán muy bien con sus materiales. Una banderola de bienvenida, otra de ceremonia, otra de seating plan… y así la base estilística se consolidará todavía más. Podemos imprimirlas con los colores y diseños que nos pidáis, si bien es cierto que hablando de invierno no podemos evitar recordar la Colección Frutos Rojos. Si luego, además, se imprimen las minutas y los meseros de boda a juego, la mayor parte del trabajo de decoración quedará hecho.

Algo que también te recomendamos es el uso de metacrilato transparente como material. Quedará perfecto en la atmósfera invernal y se integra con la cristalería de la mesa y la calidad que aporta es óptima. Para esto nada como los marcasitios, que harán que el conjunto quede perfecto.

El Mueble

¿Boda en Navidad o Nochevieja?

No aconsejamos que, si teníais planeada una deco veraniega, la recicléis para otra temporada. Y con esto nos referimos a que, un diseño con palmeras, flamencos y flores hawaianas no encaja en una boda de diciembre en España, y menos aún en una fecha como Navidad o Nochevieja. Ojo, solo nos referimos a decos específicamente veraniegas. Si teníais planeada una deco neutral y atemporal, ¡por supuesto! Ha sido una suerte para vosotr@s el poder reutilizarla. Seguramente con un par de matices pase inadvertido que su «finalidad» era otra.

Si te casas en Nochevieja, puedes usar una deco brillante, festiva, especial y con un toque elegante. Cristal, tonos metálicos… algo que desprenda glamour, ya que para muchas personas es la festividad más importante del año y la ocasión lo merece. ¡No olvidéis imprescindibles como el confetti o los matasuegras!

S6 Photograhy

Si te casas en Nochebuena, puedes recurrir a los colores y texturas de esta fecha: verdes, rojos, bolas brillantes, terciopelo, piñas y acebo, lazos, cuadros… un Must total para esta fecha es poner árbol y decorarlo, y ¿qué mejor que ofrecer las decoraciones personalizadas para l@s invitad@s? Estrellas con los nombres personalizados que hicimos en la boda de M&J nos hacen una idea de lo precioso que puede resultar.

Recuerda: no hay por qué utilizar todos los recursos de una temática para que la deco salga bien. Vosotr@s elegís en qué grado queréis hacer visible la fecha o la época en la que se celebra. A lo mejor, con una simple y sutil alusión marcaréis la diferencia. De nuevo: ¡Menos es más!

Vía Pinterest

Catering, localización y transporte

Lo bueno de esta época es que no tenéis que idear la boda como en verano, con un plan A para exterior y un plan B para interior si al final hace mal tiempo. Aquí ya contamos con un tiempo propicio para boda interior, así que no habrá sorpresas y será más fácil de gestionar.

Para estos meses podéis adaptar el menú. Se suelen ofrecer más opciones calientes. ¿A quién no le entra bien una sopita en pleno diciembre? Si además utilizáis ingredientes de temporada conseguiréis una coherencia y valor añadido. El vino será un gran aliado (más de lo habitual) y si tenéis asistentes fumadores estaría bien que tengan un espacio cubierto y agradable donde poder estar.

Es imprescindible una buena temperatura en el interior, buen acceso desde el exterior por si llueve; nadie quiere hundir sus tacones en el barro o resbalar. También básico pensar en el desplazamiento hasta el lugar, poniéndoos en el mes en el que lo celebraréis. En verano poner un autobús o dos es una opción, pero en invierno quizás sea más necesario debido a la climatología.

Foto vía Pinterest

De esta forma podéis evitar la angustia de asistentes (sobre todo mayores) pensando en tener que volver de noche y lloviendo/nevando por un lugar que no conocen. Si no podéis ofrecer esta opción, lo mejor es que haya posibilidad de hospedaje por si el tiempo se tuerce y algunas personas se pueden encontrar muy cansada para volver.

El truco que siempre damos para las bodas a la hora de organizarlas es que, ante la duda, os pongáis en el lugar de l@s invitad@s. Eso os ayudará a ver las cosas desde otro punto de vista y a tomar la mejor decisión para todas las partes.

Por lo demás, lo único que queda por decir es que por mucho frío que haga, no tiene por qué influir en absoluto en lo maravillosa que pueda ser vuestra boda. Podríais tener un poco de mala suerte y que os coja un buen chaparrón en el momento de ir al lugar de la celebración o ceremonia, pero solo se trata de planearlo y tomar medidas. Una vez dentro, nada hará que os arrepintáis de esa decisión. Porque si de por sí las bodas son únicas, las bodas de otoño e invierno lo son todavía más.

Pinterest

¿Qué os han parecido nuestros tipos para decoración y previsión en bodas en estaciones frías? Recordad que este post tiene una primera parte, dedicada especialmente a la vestimenta: tanto de novia, como de novio, como de invitadas.

¡Un abrazo!